¿Problemas con la voz?
La voz es nuestro instrumento de comunicación. La laringe, es el órgano de fonación y puede alterarse si se abusa o se hace un mal uso de la voz. Hay diversos factores nocivos para nuestra voz que pueden dañarla: el tabaco, el alcohol, la contaminación, el reflujo gástrico…
En personas que utilizan la voz como herramienta de trabajo (profesores, cantantes…) son frecuentes dos patologías: los pólipos y los nódulos laríngeos. Estas patologías también pueden aparecer en personas que no utilicen la voz como herramienta principal de su trabajo, pero sí que hagan un mal uso de la misma al carecer de una buena técnica vocal.
¿Qué son los pólipos?
Los pólipos pueden ser causados por el mal uso de la voz o por un proceso inflamatorio. Pueden aparecer en una o en ambas cuerdas vocales; su imagen semeja a una inflamación o protuberancia, similar a una ampolla. Son más frecuentes entre los 30 y los 50 años, sin un claro predominio entre hombres o mujeres. Los síntomas que producen son disfonía, dificultad para hablar, voz entrecortada, sequedad… Si son de gran tamaño pueden provocar al paciente la sensación de tener un cuerpo extraño en la garganta.
¿Qué son los nódulos?
Los nódulos son lesiones benignas en ambas cuerdas vocales causadas por el abuso de la voz. Con el transcurso del tiempo, el abuso continuo de las cuerdas vocales tiene como resultado un tejido suave e inflamado en cada una de las cuerdas vocales. Estos tejidos pueden endurecerse y convertirse en lesiones similares a un callo, llamados nódulos. Mientras más se prolongue el abuso de la voz más se agrandarán y endurecerán los nódulos. Los nódulos son más frecuentes en las mujeres, debido al tamaño de las cuerdas –menor que las de los hombres–, entre los 20 y los 50 años. Pueden aparecer también en la infancia. Provocan una disfonía que se agrava de forma progresiva.
La mejor manera de entender la diferencia entre los nódulos y los pólipos es imaginar que un nódulo es un callo y un pólipo es una ampolla.
¿Cómo se diagnostica?
Para diagnosticar tanto los pólipos como los nódulos, se utilizan técnicas que permiten visualizarlos como la laringoscopia indirecta, la nasofibroendoscopia y la videoestroboscopia, realizadas por un otorrinolaringólogo.
¿Se cura?
En el caso de los pólipos, se recurre a la fonocirugía (cirugía de las cuerdas vocales), la cual se realiza bajo anestesia general. Esta intervención requiere de reposo vocal durante dos días, posteriormente, será necesario reeducar la voz con rehabilitación y la ayuda de logopedas y foniatras, para evitar su reaparición al eliminar su factor causante (el mal uso de la voz). En cuanto a los nódulos, depende del tipo de lesión y de quien la padece. Si es un niño, dependiendo de su edad, se trata con reeducación vocal y maniobras para mejorar la técnica vocal. En adultos, el tratamiento es también la rehabilitación logopédica, recurriendo solo a la cirugía en caso de fracaso de la misma.